Debido al brote de coronavirus, todos estamos en cuarentena voluntaria (y si no estás aún, ya deberías de contribuir a aplanar la curva), encerrados en nuestras casas hace un par de días tratando de seguir con nuestra vida de la forma más normal posible, tomando clases y trabajando a distancia, pero para adaptarnos a la nueva dinámica necesitaremos disciplina.
Para ser productivo desde tu hogar, deberás ponerte una rutina y horarios estrictos como si fueras a la oficina (y jamás te quedes en cama). No es para nada buena idea que te quedes en pijama todo el día, porque debemos admitir que usualmente usamos ropa ancha y vieja que ya no nos gusta, y a la larga genera un efecto negativo en tu motivación y autoestima.
Cuando trabajas desde casa, pequeñas acciones pueden hacer un gran cambio y arreglarte es una de ellas, porque la ropa que te pones (igual que cuando sales a la calle) influye en cómo te sientes y la imagen que proyectas al exterior, porque cuando nos vestimos por las mañanas lo hacemos para nosotros mismos ¿o no? Grábate este principio básico de moda.
No solo te arregles de la cintura para arriba cuando tengas una videoconferencia (todos lo hemos hecho) porque aunque no esperes visitas y “nadie te vaya a ver”, tú te vas a ver a ver a ti mismo y eso es suficiente. Ponte ropa adecuada para tus actividades, no hablamos de que te vistas súper formal pero sí algo cómodo que te guste para que te suba el ánimo.
Despiértate temprano, báñate, vístete y hasta perfúmate, notarás la diferencia. Muchos son los beneficios de algo tan simple como arreglarse estando casa; transmites profesionalidad en las videoconferencias, eres más productivo porque como te vistes influye en tu humor y disposición; y finalmente, pones un límite cuando terminas el trabajo y te pones la pijama.
Por Elle Mx