Sin abandonar su glamour, estos cinco colores se bajan de la pasarela otoño invierno 2024/2025 a tu casa, adelantando lo que se llevará la próxima temporada. Una previsión que te permitirá pensar (y comprar) con perspectiva, aunque estemos en verano.
La paleta dominante apuesta por tonos oscuros, como era de esperar, pero también de tonalidades llamativas e intensas que aportarán un plus de sofisticación y personalidad a tus estancias. Sabemos que aún queda tiempo, pero siempre es bueno estar preparada para lo que te deparará el universo decorativo futuro. ¡Que no te tome desprevenida!
Morado
Carolina Herrera, Fendi o Prada le han hecho un hueco en sus desfiles, especialmente a los tonos ciruela y berenjena en vestidos, pantalones o capas. Aunque la pasarela lo ha mostrado a modo de total look, la clave para usarlo en tus estancias se encuentra en el equilibrio y en la mesura para que no te empaches con él y le odies tras dos meses contigo. En pequeñas dosis resulta sofisticado e, incluso, algo coquette. ¡No le tengas miedo!
Cherry red
Gucci lo adelantó en su desfile de primavera 2024 y las pasarelas de otoño invierno 2024 2025 lo han convertido en uno de los favoritos para la temporada. Este rojo con estilazo de granate pisa con fuerza en las colecciones de Versace y Ferragamo, pero también en el street style.
Para tu hogar, tiene mucho que aportar, destila fuerza, belleza y personalidad, pero también, calidez. Una de las cualidades que les falta a otras tonalidades de este color. El rojo cereza llega al hogar demostrando que el otoño no tiene que ser necesariamente oscuro y marrón, sino que también puede ser vibrante y envolvente. Ideal para textiles, no tiene problemas de adaptación y puede subirse a las paredes y los muebles.
Verde aceituna
El verde lleva dirigiendo, cromáticamente hablando, tanto la moda como la casa varias temporadas. Sin embargo, no nos cansamos de él por su carácter natural y bonachón, que nos conecta con el exterior y nos crea la ilusión de vivir en el campo, aunque desde nuestra ventana solo vislumbremos edificios.
El próximo otoño invierno recuperamos su versión más amarillenta y la hacemos nuestra bien brillando en solitario o combinada con otros de los tonos estrella, como el berenjena, o con un aliado indiscutible como el marrón. En decoración este color ofrece muchas alternativas y no teme ni al estilo clásico ni a la extravagancia desbordante.
Royal blue
A medio camino entre el azul klein y el azul berlinés, este tono algo eléctrico irradia fuerza y poderío por donde pasa, en el desfile de House of Aama o de Sergio Hudson lo hizo, acaparando toda la atención.
Eso sí, la misma fuerza que lo hace potente, puede ser su mayor debilidad, ya que puede eclipsar al resto de la decoración o pasarse de moderna. Por eso, una buena idea para incorporarlo este invierno a la decoración de tu casa es hacerlo en pequeñas dosis en textiles y complementos, como alfombras, cojines o jarrones. Solo las más atrevidas deben apostar por él a lo grande. En estos casos, recuerda que el contraste con colores suaves, como el rosa pastel, funciona a la perfección.
Rosa palo
Dulce, cálido y apetecible, Jill Sander, Simone Rocha o JW Anderson lo aplican en ligeros y bellos vestidos que no temen al frío del invierno.
En casa estamos ante un color sutil y nada ñoño, que puede moverse entre tonalidades más oscuras o suaves, según el efecto que quiera provocar. Una base más cálida que el blanco, que potencia la luminosidad de tus ambientes e imprime un toque de calidez. Funciona bien con madera y tonos oscuros, pero también con blanco y materiales como la cerámica, si quieres un toque de frescura.